Septiembre siempre sabe salado, como ahogándose en el mar. Como espantada en una feria con múltiples colores, Sí, arriba del carrusel bordeando la muerte. Una muerte pequeña, pero sin vida. Sin vida, la vida vuelve pero nunca es la misma. Arruiné mi vida cuando quise acabarla.
Una de dos, o tiras del gatillo y das directo al corazón o te quedas para siempre sangrando y agonizando sin morir. Es solo una de las dos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario