martes, abril 9

Inspírame

Hay que dejar de intentar ser consecuentes y simplemente ser, porque cuando intentamos seguir esa lógica que en realidad el mundo simplemente nos impone, terminamos complicando más la auto-definición que tenemos del ser nosotros mismos. 

Odio el mundo tal como está, me gustaría tener palabras tan poderosas que pudieran remecer a la gente y así cambiarlos de manera que no sean mejores, sino que conformen tan solo un lugar mejor y más amigable en el que subsistir.

Qué mal generalizar, como si todos tuvieran un mundo propio tan complicado como el que me configuro yo misma.

Siempre me pregunté por qué me costaba tanto escribir cosas que fueran optimistas, y siento que el optimismo va de la mano con la estupidez, como las rusias son tontas y felices, y también está la gente que ofrece Herbalife; o tal vez también está en que soy tan productiva cuando todo mi interior pelea consigo mismo y confluye en pensamientos más deprimentes, que menosprecio mi lado simpático, o no quiero que el mundo vea esa otra parte de mí -aunque esta tampoco la ven- y terminen notando que aparte de loca soy bipolar. O simplemente un ser humano normal, quizás a todos les pasan todas las cosas, quizás otros muestran más su lado bonito, yo muestro más el oscuro, quizás me creo darks, quizás, quizás.

No puedo ordenar todo lo que pienso, necesito una máquina de escribir -más vintage- que transcriba todos mis pensamientos y los publique, o tal vez en ese caso solo resulte construyendoescribiendo un mundo más loco que la tierra de Ooo.

--Sin editar--

lunes, febrero 11

Pill #1

Alguna vez quise comenzar todo de nuevo, por medios que marcaran una renovación, pero fallé. Me di cuenta de que soy solo una consecuencia de todo lo que he sido y no me puedo librar. Traté de cubrir la tierra con más tierra y todo lo que tengo es una montaña de dudas e inquietudes, incertidumbres sobre si alguna vez estaré mejor -qué estado es ese- y si seré diferente. A veces juego a ser optimista y al poco rato me siento rara, nunca he sido esa persona, ¿cómo serlo alguna vez? Renacer en un ente totalmente distinto, que ni yo ni ninguno conoce y tendré que conocer.

Se supone que me tengo que poner bien, que debo trabajar por algo, no sé si quiero.

No sé si quiero alejarme para siempre de mi melancolía, de mis pensamientos llenos de pena, de mi soledad; al fin y al cabo es lo que siempre he tenido ahí, conmigo, siempre. Sería como tener un alter-ego y asesinarlo, y ver en mis manos la sangre de mi propio yo, sin saber si él o yo era el real.